Cuidados generales para los Rosales.
No te prives de tener en tu hogar las rosas, en una maceta, en balcones, terrazas, patio o en el jardín, es una de las plantas con flores más bonitas.
Te recomiendo tener especies arbustivas y trepadoras, si se posee espacios más grandes, y las variedades más bajas híbridas de té y miniatura, para los balcones y patios.
Al plantarlo, el suelo o sustrato debe ser compuesto por tierra fértil, mantillo, resaca de río o compost y perlita, un suelo suelto con buen drenaje.
Si se colocan en macetas, estas deben ser profundas, para que las raíces crezcan cómodamente.
Colocando como base, una capa de arcilla expandida(leca), gravilla, trozos de macetas rotas, para facilitar el drenaje del riego.
Luego un sustrato para rosales, compuesto por tierra fértil, compost o resaca, humus de lombriz, perlita y turba.
Durante la floración; los riegos deben ser más frecuentes, especialmente cuando se están formando sus flores. es una planta que requiere mucho riego, especialmente en verano o cuando están formándose sus flores, de ser posible realizar el riego por la mañana temprano.
En la tierra el hoyo de plantación debe ser profundo, 50 x 50 cm libre de piedras, y de malas hierbas.
Regar profundamente el día anterior y abonar antes de plantar con triple 15, humus de lombriz, harina de huesos, aporte de hierro.
El suelo debe tener una textura media, ligeramente ácido y rico en nutrientes y humus. Si la tierra contiene salitre o es dura, es conveniente cambiarla.
Al realizar el trasplante, con mucho cuidado sin romper el cepellón, se acomoda la planta, si es de porte trepador colocar espalderas par que se pueda trepar fácilmente.
Luego regar abundantemente las primeras semanas, especialmente aquellas plantas que se encuentren en macetas , ya que se evapora más rápido el agua.
Agregar mensualmente fertilizante de liberación lenta, en gránulos, ecológico, para un buen desarrollo de la planta en genera, flores, hojas tallo y raices.
Si el lugar elegido para su plantación es muy soleado , en verano, o hay heladas en invierno, es aconsejable colocar una capa de astilla de corteza de pino o mulching para evitar el daño en las raíces
El lugar para su plantación, debe ser soleado, así la floración será más abundante.
Elegir los lugares más resguardados del viento y evitar los lugares que tienen corriente de aire, como pasillos o lugares muy altos, donde se arremolina el viento.
No plantes los ejemplares muy juntos, así podrán tener una buena ventilación y se evitará la aparición de enfermedades fúngicas.
Las flores secas se deben retirar de la planta, para que de un nuevo brote y la floración continúe por más tiempo en la planta.
Al hacerlo, cortar por sobre un nudo, de éste saldrá un nuevo brote, donde se desarrollará una nueva rama con flor.
La poda del rosal se realizará a mediados o final del invierno, para que al nacer sus nuevos brotes no se quemen con el frío o las heladas.
Hay que estar atento a las plagas y enfermedades que se puedan presentar, suelen ser atacados por varias de ellas.
Los rosales suelen ser atacados por numerosas plagas y enfermedades, tales como bortitis, roya, oídios, varios tipos de hongos, pulgones, orugas, ácaros, araña roja, escarabajos y hormigas.
Se debe revisar la planta frecuentemente y ante la aparición de algún problema, aplicar acaricidas, insecticidas o fungicidas correspondientes.
Para el pulgón puede tratarse con una solución de 1 litro de agua, 2 cucharadas de jabón neutro y 3 cucharadas de alcohol, pulverizar dos veces por semana.
Si un rosal se enferma y no se logra recuperar, es mejor tirarlo, antes que enferme a otros , y no se debe plantar allí ninguna otra especie por 12 meses.
En otoño se puede realizar una poda parcial, especialmente a los rosales trepadores, cortando o despuntando los brotes o ramas superiores, darán una nueva floración antes del invierno y se evitarán los frutos o los llamados escaramujos.
El mejor momento para podar es a mediados o finales del invierno
Poda
La poda de rosales debe efectuarse todos los años, entre los meses de junio y agosto, hemisferio sur, por ser ese el momento que la savia permanece en reposo.
Con esta tarea cumplimos dos funciones muy importante para la vida y belleza del rosal, la de rejuvenecimiento y la de formación de la planta.
Rejuvenecimiento
Con la poda logramos una planta vigorosa y joven, que redundará posteriormente en una bella floración.
Tenemos que suprimir todas las ramas viejas y las más débiles, dejando sólo tres o cuatro ramas vigorosas con un largo de 10/15 cm. aproximadamente.
Formación de la planta
Con la poda formamos una planta elegante. Es muy importante tener presente la ubicación de las yemas, al hacer los cortes de las ramas: la yema que se encuentre en el extremo superior es la que emitirá la nueva rama.
Cuando el rosal está muy cerrado, con muchas ramas en su interior, hay que eliminarlas, y dejarlas que se adaptan a la nueva formación: la primer yema que se encuentre inmediatamente debajo del corte, deberá estar orientada hacia afuera.
Si en cambio el rosal se encuentra muy abierto, con ramas que salen hacia afuera, procederemos a la inversa: elegimos las yemas orientadas hacia el interior para el nacimiento de nuevas ramas.
Sandra Gómez.
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