- Existen tres formas básicas para la siembra de vegetales;
- Siembra directa: es aquella que se realiza colocando sobre el sustrato las semillas y cubriéndolas con una fina capa de tierra. Hay que mantener el sustrato húmedo hasta que la semilla germine. Luego se realizará un "repicado", es decir, la selección de las plántulas más vigorosas para el cultivo.
- Siembra en semilleros, consiste plantar las semillas en recipientes (envase de postres, yogurt, caja de huevos, etc) o bandejas especiales para semilleros.
- Se debe colocar en un lugar templado, con claridad de luz, sin exponer a la luz del sol directa. Cuando las plántulas tengan un par de hojas, se elige las mejores desarrolladas para trasladarlas al lugar definitivo.
- La compra en comercios de plantines; es la forma más rápida y sencilla de realizar. Se elige un lugar con tierra negra fértil, bien abonada y fertilizada, con buena luz y templado.
- Al realizar el trasplante, se debe prevenir el crecimiento y desarrollo de las plantas, ubicarlas en un lugar protegido de heladas y de intensos vientos.
La Huerta en maceta, favorece el control de plagas y las enfermedades, al permitir este control, no se extiende hacia otros cultivos.
Para mejorar la polinización , podemos agregar entre las plantas especies como; tagetes, copetes, lavandas, margaritas, etc.
Una vez que la planta se desarrolló, y la colocamos en un recipiente o maceta más amplia .
Una vez que la planta se desarrolló, y la colocamos en un recipiente o maceta más amplia .
- El sol: Independientemente de que el espacio sea amplio o reducido, debemos elegir un espacio soleado, orientado preferentemente al sur. Ya que nuestras plantas necesitarán un número considerable de horas de luz para madurar.
- El agua: Por otro lado, nuestras plantas van a necesitar de riegos periódicos por lo que es importante tener un punto del que tomar agua cerca (un grifo, o colocar una manguera por ejemplo).
- Al contrario de lo que puede parecer, lo más importante de un recipiente es el volumen total de sustrato que puede contener y no la profundidad.
- Con una profundidad mínima de unos 15-20 cm es suficiente para cultivar cualquier hortaliza sin problema